Entre Ricci y Ricci pasaron siglos

A veces suceden interrogantes al ver un nombre y preguntarse: ¿puede ser…? Estaba leyendo sobre los trabajos matemáticos de Galileo (no nos equivocamos al pensar en este nombre) cuando aparece que comenzó el estudio de las matemáticas bajo la tutela del matemático Ricci. Entonces pienso: anda a ese lo conozco yo, estudié su cálculo tensorial. Y conforme tu mente recuerda la curvatura de Ricci te das cuenta que hay un tremendo error: en uno de sus casos estaba definida sobre una variedad de Riemann y además desempeña un papel importante en la teoría de Einstein. Sin obviar que el cálculo, ya tensorial o no, no estaba presente en la juventud de Galileo, aunque él aportase a su descubrimiento.

Es  una obviedad, algo falla, no es el Ricci que yo conocía. ¿Por qué había de serlo? No es el primer caso de nombres iguales (en otra ocasión hablaré de confusiones con los Bacon), pero este es curioso.

Ostilio Ricci(1540-1603) servía como constructor de fortificaciones para el Duque Francesco de Florecia, uno de los empleos mejor remunerados para un docto en matemáticas. Sus conocimientos de Euclides y Arquímedes le granjearon fortuna y un joven aprendiz que estaba estudiando medicina. Ostilio Ricci había sido, a su vez, aprendiz de Tartaglia y vio en Galileo una mente muy despierta. Persuadió Vincenzo, padre de Galileo, para que este dejara sus estudios y se centrara en las matemáticas. No se equivocó.

Como he dicho este Ricci no es el Ricci que conocía. Tampoco Michelangelo Ricci(1619-1682), hijo de Prospero Ricci y Veronica Cavalieri(¿tendrá algo que ver con Bonaventura?), amigo de Torricelli y alumno de Galileo. Este si trabajó en el incipiente cálculo con una obra Exercitatio geometrica, De maximis et minimis (1666) que se incluyó como apéndice a la Logarithmo-technia (1668) de Nicolaus Mercator.

Michelangelo Ricci terminó sus días como Cardenal, desde 1681, viendo recompensados sus servicios a la curia igual que el jesuita Mateo Ricci. Tres, si omitimos el nombre, son las coincidencias entre estos dos Ricci: italianos, servían para a la iglesia y enseñaban las matemáticas.

Mateo Ricci (1552-1610) estudió matemáticas y astronomía de la mano de Clavius y llevó el cristianismo a China, realizando la primera traducción de los Elementos de Euclides al chino. Bueno, los seis primeros libros basados en la copia de la versión en latín de los Elementos de su maestro Clavius.

Estos tres Ricci quedaban muy alejados en la historia del Ricci que yo conocía: Greogorio Ricci-Curbastro(1853-1925), aunque por el apellido Curbastro nunca lo habría reconocido. Sus trabajos sobre cálculo tensorial se popularizaron en las publicaciones junto con su alumno Tullio Levi-civita firmaba, y, parece ser, que firmó con la forma corta del nombre Ricci, dejando para la posteridad el tensor de Ricci, que bebía de las fuentes de Elwin Christoffel.

Así que no es de extrañar que lo confundamos con Giovanni Ricci (1904-1973), quien presentó su tesis con el título Le transformazioni de Christoffel e di Darboux per le superficie rotonde,coniche e cilindriche. Alcune generalizioni, per rotolamento del cono e del cilindro di rotazion. Aún con ese título Giovanni no frecuentó mucho la geometría diferencial, siendo más proclive a la teoría de números, como su alumno Enrico Bambieri, Medalla Fields en 1974.

En fin, cinco Ricci, si no me he dejado ninguno, en quinientos años que han mantenido el apellido rizado entre las matemáticas.

Claro es que habrá más apellidos ilustres, y a todos nos viene uno a la mente: Bernoulli; pero ese tiene trampa: todos eran familia.

Esta entrada participa en la Edición 3.1415926535 del Carnaval de Matemáticas, cuyo anfitrión es La Aventura de la Ciencia.